Tras la finalización del clasificatorio de cara a acudir a los próximos Juegos Olímpicos de Tokio, y en el que el pontés Miguel Alvariño logró ese pasaporte, el tirador pontés y sus compañeros del Club Sílex Daniel Castro y Pedro Pina acudieron al primer Gran Premio de España del año, el disputado el pasado fin de semana en Valladolid. Una competición en la que también formaron el paralímpico Guillermo Rodríguez y Teresa Cerezo, del Arco Ferrol.
Ya sin la presión del citado clasificatorio, los representantes locales terminaron su actuación en tierras pucelanas con dos medallas como botín, una plata y un bronce. El subcampeonato llegó gracias a la tirada llevada a cabo por Daniel Castro en la prueba de arco recurvo absoluto. El pontés, después de un “round” clasificatorio discreto, en el que ocupó el decimoquinto lugar, disputó la final del Gran Premio ante el ucraniano Oleksii Hunbin, contra el que perdió por 6-2. Por su parte, Alvariño, que según él mismo manifestó no estuvo a su mejor nivel, fue cuarto en el ranking previo, avanzando hasta cuartos de final, en donde cedió ante otro ucraniano, Makarevych por un ajustado 6-5, acabando quinto. Pinta, mientras, fue trigésimo tercero en esta tabla.
Por equipos, el Silex pontés se colgó el bronce, después de ceder ante Pozuelo en semis y ganar al Almussafes Xics (6-2) en la pelea por la tercera posición. En arco compuesto, los ferrolanos Rodríguez y Cerezo terminaron en la decimoséptima y séptima posición, respectivamente.