Canarias, comunidad española con la menor incidencia del Covid-19 a siete días, con 43,51 casos por 100.000 habitantes, reactivó ayer, con el regreso de alemanes y británicos, su motor económico, el turismo, una apertura que el Partido Popular critica porque se hace sin “blindar” la región ante nuevos contagios.
Este ensayo de lo que podrá ser la temporada alta del turismo en Canarias, que comienza el próximo 1 de noviembre, se precipitó por el levantamiento del veto sanitario que Alemania y el Reino Unido mantenían sobre el archipiélago, región que mejoró considerablemente su situación epidemiológica respecto a la pandemia, por lo que estos dos mercados de visitantes dejaron de imponer a sus nacionales una cuarentena tras su estancia en las islas.
Sin controles en los accesos
La remontada de este cero turístico inédito al que llevó la pandemia comenzará, sin embargo, sin las garantías sanitarias suficientes, a juicio del PP y de un sector del empresariado, que exigen controles en puertos y aeropuertos para que pueda hablarse de corredores seguros con los países emisores de visitantes al archipiélago y también con el resto del territorio nacional.
Así, este fin de semana está previsto que lleguen a Canarias 37 vuelos procedentes de Alemania (21 ayer y 16 hoy), un 50 % más que el pasado, y 73 procedentes del Reino Unido (38 y 35), un 12% más, según informaron ayer fuentes de AENA.
De Alemania llegarán 13 vuelos a Gran Canaria, 11 a Tenerife Sur, 10 a Fuerteventura y 3 a César Manrique-Lanzarote, mientras el cese de las restricciones de los procedentes del Reino Unido entrará en vigor hoy.
Como los anuncios de la supresión de las recomendaciones de no volar a las islas Canarias desde Alemania y el Reino Unido son muy recientes, esta programación puede cambiar notablemente a lo largo de los próximos días, dadas las ofertas y el incremento de hasta un 500% de la demanda que comenzaron a promover aerolíneas como Ryanair o EasyJet, unos movimientos que se tradujeron en subidas en bolsa de empresas como Meliá, junto a los grupos de transporte aéreo IAG, AENA o Amadeus.
Sin grandes reaperturas
El regreso a Canarias de unos viajeros fieles, cuyo gasto medio diario superó, en conjunto, los 24,4 millones de euros en el último tramo de 2019, no hace prever de momento la apertura de hoteles y plazas disponibles a los grandes operadores turísticos de las islas, que, aunque recibieron con ánimo el fin de los vetos sanitarios que pesaban sobre la región, prefieren ser cautos y esperar a ver cómo evoluciona la pandemia en los mercados europeos.
Ese es el planteamiento que trasladó ayer el director comercial de Lopesan Hotel Group, José Alba, y el consejero y responsable de la Zona Atlántica de Riu Hoteles, Félix Casado.
El representante de la cadena mallorquina insistió en que, una vez que “la maquinaria” turística de Canarias se puso a andar, con el regreso de los visitantes británicos y alemanes, “las pegas” para que sigan haciéndolo con normalidad en adelante “deben ser las mínimas”, siempre y cuando se cumplan los requisitos sanitarios que se hayan fijado.
Aunque los principales operadores turísticos transmitieron a esta cadena hotelera canaria que el archipiélago “es el destino más importante para este invierno y que centrarán todos sus esfuerzos en recuperar el terreno perdido, potenciando los paquetes vacacionales a las islas durante los próximos meses”, según reveló Alba, la compañía considera que “aún es pronto para tener una visión detallada del comportamiento de la demanda”.
Por su parte, la consejera de Turismo del Gobierno canario, Yaiza Castilla, prevé que los flujos turísticos procedentes de estos países se reactiven de forma progresiva y avanza que, por lo pronto, la próxima semana llegarán a las islas 70 vuelos con 13.000 plazas aéreas procedentes de Alemania, tal y como informaron las aerolíneas Condor, TUI, Ryanair, Easyjet y Lufthansa. Para los próximos siete días también hay programados con Canarias 149 vuelos de llegada desde el Reino Unido, según AENA.