La comisión de investigación sobre el proceso de fusión de las extintas cajas gallegas se constituyó ayer por tercera vez para retomar su actividad en un período en el que el diputado del PPdeG, José Manuel Rey Varela, presidirá este órgano.
La elección del presidente se decidió ayer en una sesión en la que también se eligió a Lupe Murillo (PPdeG) como vicepresidenta y a Ramón Fernández (BNG) como secretario. El presidente del Parlamento, Miguel Santalices, dirigió la sesión y les dio la “enhorabuena” a los elegidos para formar parte de la Mesa de esta comisión, cuya reactivación fue aprobada en pleno el pasado mes de octubre.
Reactivación fallida
Tras esta primera reunión, la comisión sobre la fusión de las cajas, que se creó hace dos legislaturas y que tras una reactivación fallida en diciembre de 2016 también quedó sin conclusiones, debe aprobar nuevamente un Plan de Trabajo.
Los grupos parlamentarios aspiran a retomar los trabajos donde se dejaron para, en esta legislatura, concluir el dictamen, lo que supondría aprovechar el contenido de las comparecencias que ya se han producido en el seno de este órgano parlamentario.
Con todo, los grupos de la oposición entienden que antes de ponerse a trabajar en las conclusiones, la Xunta debe cumplir con su obligación ante la Cámara y ofrecer toda la información de la que dispone sobre el proceso de fusión, tal y como solicitó la justicia.
El TSXG condenó a la Xunta al entender que, en la pasada legislatura, la administración autonómica vulneró el derecho a la información del por aquel entonces diputado Antón Sánchez (Grupo Común da Esquerda) al negarle reiteradamente información sobre el proceso de fusión.
Presupuestos como prioridad
El popular Pedro Puy dijo que el “ánimo” es acabar los trabajos, pero dijo que la “prioridad” del PP es sacar adelante los presupuestos y las conclusiones de la comisión de reactivación económica, social y cultura de Galicia.
La diputada del BNG Noa Presas espera que el PP “no meta en el congelador” de nuevo esta comisión, mientras que el socialista Pablo Arangüena confía en “sirva para lo que no sirvieron las dos anteriores”.