Las inspecciones de trabajo que se están llevando a cabo en los centros municipales, como consecuencia de la denuncia presentada por la representación sindical de los trabajadores municipales ante las deficiencias observadas, continuaron ayer en el cementerio municipal.

La inspectora desplazada al camposanto, que estuvo acompañada por el servicio de prevención y delegados de CSIF y CIG; no solo constató las deficiencias denunciadas el pasado mes de septiembre por parte de los trabajadores.

Así, también detectó otras nuevas, algunas de gravedad, en áreas como la de la capilla del cementerio –hay una zona con riesgo de desplome y caída de objetos que deberá ser señalizada y prohibido el paso–, por lo que podría haber responsabilidades por parte del Concello, como institución encargada del mantenimiento de las instalaciones municipales.

Asimismo, la inspectora recogió en el acta las deficiencias observadas en esta visita, lo que, como explican desde la representación sindical. 

“No se trata ya de una denuncia de los delegados de prevención, que el alcalde calificaría de alarmista sino que los problemas figuran recogidos en el acta de infracciones  y reflejan las graves deficiencias de los edificios municipales por falta de mantenimiento, mientras que desde el gobierno local se están dejando varios millones del presupuesto sin gastar”.