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jueves | 25 abril | 2024
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, indicó ayer que los daños generados en infraestructuras por la sucesión de temporales de las últimas semanas en Galicia ascienden a 21 millones de euros, según un primer balance provisional.
Tras la reunión semanal del Consello da Xunta, Núñez Feijóo apuntó que se trata de un primer balance sobre infraestructuras dependientes de la comunidad, y que podría incrementarse, “aunque no de manera sensible”, en función de la evaluación del último temporal.
Explicó que los daños corresponden a seis millones de euros en centros de saúde, dos millones de euros en centros educativos, un millón en espacios medioambientales y parques naturales, medio millón en centros administrativos, cuatro millones y medio en puertos competencia de la comunidad y casi siete millones de euros en carreteras.
Además, aseguró que se han producido “otro tipo de daños”, en alusión a pérdidas en los sectores productivos, principalmente agroganadero y de pesca y marisqueo.
En el sector primario cifró las pérdidas en “más de 70 millones de euros” e indicó que el Gobierno ya ha adoptado medidas con el Real Decreto del pasado 21 de febrero. Además, la Xunta gastó cinco millones de euros en seguros, al que el sector primario puede recurrir.
Feijóo subrayó que en este campo la Xunta está colaborando destinando más de cinco millones de euros en la firma de seguros en los sectores primarios que ayuden a paliar pérdidas; y también completando el análisis minucioso y remitiendo la información al Gobierno central de los daños de acuerdo con las asociaciones agrarias.
En el campo marítimo, recordó que una de las medidas promovidas desde la Xunta es el aplazamiento y flexibilización del pago de las cuotas sociales al Instituto Social de la Marina, “y también estamos solicitando créditos blandos para la financiación de liquidez y la realización de reparaciones en aparejos, embarcaciones y el pago fraccionado de tasas autonómicas”.
A estas iniciativas, Feijóo añadió las ayudas por importe de 1,5 millones destinados a paliar las pérdidas de los productores del mejillón a causa de la toxina.
