La Diputación de A Coruña organiza estos días la participación de catorce empresas en el II Salón Ecolóxico de Galicia, Ecogalia, que se realiza en Expocoruña desde el viernes 21 y finaliza hoy. La iniciativa pretende ser un encuentro de las actividades ecológicas, lo cual engloba el emprendimiento verde, el compromiso con la producción local y la responsabilidad social y medioambiental, entre otras.
Una de las empresas invitadas por el gobierno provincial es la ferrolana Cuatro Pececitos, dedicada a hacer arte con lo que arrastra el mar a las playas de la comarca. “Como vivimos en el puerto de Ferrol y veraneamos en Cabañas, paseamos mucho por la playa y siempre encontrábamos tablas, puntas, maderas... Y por eso pensamos que podíamos darles una segunda oportunidad”, comenta Daniel Alvariño, fundador de la idea, junto a su mujer Ana y sus cuatro hijos de tres, diez, trece y dieciséis años –de ahí el nombre del negocio–.
Arena, cristales pulidos, plásticos degradados, madera, conchas, ramitas... Muchas veces se llevaban todo esto a casa y hacían algún marco o cuadro con conchas o algas secas, pero poco a poco y con la ayuda de internet, se dieron cuenta de que “el trabajo con madera a la deriva era un arte” y empezaron a construir pequeños trabajos.
Alvariño reconoce que a la gente le asombra lo que se puede llegar a hacer con algo que, a priori, puede parecer basura, pero asegura que en Europa “esto es más habitual y la gente lo valora; en España no hay nadie que haga lo mismo que hacemos nosotros y creo que es un poco porque aquí no se valora la artesanía como en el resto del mundo”, explica.
La inspiración surge, asegura, de los paseos junto al mar y dependiendo del material que quieran obtener van a una playa o a otra. “Si queremos plástico vamos a Doniños, si lo que buscamos es madera pues a Ponzos y los troncos los cogemos en Caranza”, explica el creador de Cuatro Pececitos. 
Puertos, casas, campos y escenas fácilmente reconocibles en cualquier pueblo costero de Galicia, son las temáticas que siguen sus creaciones, donde el único material artificial que puede llegar a haber es el pegamento o la pintura.
Se muestran encantados con poder participar en esta edición de Ecogalia, ya que les da la oportunidad a proyectos como el suyo de mostrar sus creaciones y “más que denunciar, es intentar concienciar sobre la importancia de realizar una labor de conservación y reciclaje de las playas durante el invierno”, ya que las playas es cuando más sucias se encuentran a causa de los temporales.
Con la idea de “ser una gotita en el océano”, Daniel y Ana comercializan sus obras en diferentes páginas web, además de en diferentes comercios pequeños de toda Galicia que se interesan por su trabajo.
También están presentes en varias ferias por interés propio o por invitación, como es el caso de Ecogalia, la cual recomiendan visitar “por la multitud de cosas que existen dentro del mundo de la ecología y ni te imaginas”, explica Daniel Alvariño.
Crear artesanía gallega a la par que se recicla y limpian las playa “es muy ilusionante y da un valor añadido a nuestra trabajo”, concluye el ferrolano. n