El primer día laborable en estado de alarma se ha notado en las calles de toda España por la ausencia de peatones, el drástico descenso del uso del transporte público y privado y la utilización masiva de guantes, una jornada en la que España registra casi 10.000 casos de coronavirus y la cifra de fallecidos se eleva a 309.
Los contagiados por coronavirus registrados ayer en el último balance se elevaban a 9.191, lo que supone casi 1.500 más que el domingo. De ellos, 3.215 de ellas están hospitalizadas, según los datos facilitados ayer por el Ministerio de Sanidad.
El comunicado indica también que 432 personas están en unidades de cuidados intensivos, de los que más del 50 % (253) están en la Comunidad de Madrid, que sigue siendo la comunidad que sigue contabilizando un mayor número de contagios, con 4.165, seguida de Cataluña (903), País Vasco, (630) y Castilla-La Mancha,con 567 positivos.
Según el Ministerio, 530 pacientes contagiados por el Covid-19 ya han sido dados de alta.
La jornada de ayer fue anómala para millones de empleados, la mayoría de los cuales ya sí que optaron por trabajar desde casa.
En lugares como Atocha, la Puerta del Sol o la plaza Mayor, los únicos establecimientos abiertos –supermercados, farmacia, estancos…– no registran apenas afluencia, y los clientes respetan con disciplina las distancias de seguridad recomendadas.
Aparte del uso generalizado de guantes y de mascarillas, los comercios de alimentación funcionan como un día cualquiera, salvo la presencia de un mayor número de personal de seguridad y cierto nerviosismo.
Lo mismo en el Metro, cuyo sistema de megafonía avisa de que hay que aprovechar los espacios a lo largo de andenes y vagones. Un medio de transporte que ayer utilizaron un 75 % de usuarios menos que el pasado lunes.
Por su parte los militares de la UME explicaron ayer que su misión aquí es evitar la acumulación de personas y que, por el momento, se está cumpliendo.