Los partidos de la coalición En Marea –Podemos, Anova y EU– insistieron ayer en la necesidad de tender puentes con BNG y PSdeG pese a que la primera reacción haya sido el rechazo de ambos partidos al emplazamiento lanzado desde la asamblea para sentarse en una “mesa por el cambio” y buscar puntos de encuentro con el objetivo de lograr un gobierno diferente a los del PP en las instituciones y, singularmente, en las autonómicas.
Así, la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, identificó la la propuesta como “una magnífica cortina de humo para intentar tapar los problemas o la grave crisis” que afronta En marea.
Aunque Pontón consideró “un poco precipitado” entrar a valorar un planteamiento que conoció “por los medios”, según dijo, y, aunque no descartó el diálogo, puesto que está en el “ADN” del Bloque, sí rechazó “convertirse ni en una sucursal de Podemos ni en el escenario preelectoral de la campaña de la señora Bescansa”, la número tres de Podemos que participó en la asamblea.
Cuestionada sobre si existe malestar por el hecho de que Podemos pudiese tratar de marcar la agenda del BNG con este tipo de propuestas, la portavoz negó que se trate “de un problema de malestar ni de bienestar”. “No queremos que la política se haga a través de ruedas de prensa ni del titular del día; hay mucho más que hablar, que decir y las formas también son importantes en política”, aseveró.
Por su lado, el portavoz parlamentario del PSdeG y candidato a las primarias para la elección del aspirante a la Presidencia de la Xunta, José Luis Méndez Romeu, expresó su recelo sobre la invitación pues, a su juicio, forma parte de la “política de gestos para la prensa y de fotografías sin contenido” que caracteriza a los socios de En Marea.
Méndez puntualizó que la decisión corresponde a la gestora pero recordó que esa invitación procede de quienes “hace solo unas semanas impidieron un gobierno socialista en España” y prefirieron “apoyar la política de Rajoy”.
“Es un poco incomprensible”, mantuvo, crítico con Podemos porque, “cuando de verdad hay que comprometerse, se oponen a un gobierno socialista”, y ahora “mandan cartas”. “¿Para hablar exactamente de qué?”, se preguntó.
proyectos en común
Mientras, la secretaria general de Podemos Galicia, Carmen Santos, considera “importante” que En Marea “tienda este puente con el BNG y el PSdeG”, porque sienten que “es una reclamación de la ciudadanía que está sufriendo las políticas austericidas”. “Es fundamental juntar lo que tenemos en común, aunque mantengamos nuestros proyectos”, argumentó.
En la misma línea se pronunció la coordinadora nacional de Esquerda Unida, Yolanda Díaz, quien expresó su “sorpresa” por que las fuerzas de izquierda “no se sienten” a hablar antes de expresar una postura contraria. También el coordinador nacional de Anova, Antón Sánchez, se manifestó en términos similares. “Consideramos que la necesidad de diálogo es evidente para ver las líneas y las políticas en las que estamos de acuerdo y para una mayoría alternativa en este país”, remarcó.