Realizar la pausa para el café con los compañeros de trabajo influye positivamente en la productividad y el estado anímico para 5 de cada 10 riojanos.
Para ellos, la clave está en la calidad y trazabilidad del producto: “Lo más importante para nosotros es que los productores y todos los que intervienen en el ciclo del café sean remunerados de manera adecuada y reconocidos por su trabajo.
En Alfonso Molina 3, junto a Fernández Latorre, ha abierto sus puertas hace apenas un mes Doña Bárbara Café, un pequeño local dedicado íntegramente a esta bebida. Además de poder llevarte un café preparado, en diferentes modalidades, también se venden paquetes de diversas especialidades –en grano o molido–, dulces caseros, utensilios para prepararlo y revistas.
Tras el éxito y el interés del público, se planteó la creación de un proyecto propio liderado por Marcos González, responsable de calidad de Delikia, que tendría como misión difundir la cultura del café y contar la historia que hay detrás de cada grano. “Root Café nace para cubrir una necesidad, enseñar al mundo de dónde viene el café, cómo se elabora, acercar el café de origen a nuestra casa u oficina y, sobre todo, enseñarnos a disfrutarlo.