El presidente de Estados Unidos (EEUU), Donald Trump, fue visto este sábado jugando al golf en su complejo Trump Turnberry, en el oeste de Escocia, antes de recibir allí en los próximos días a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y al primer ministro británico, Keir Starmer.

El líder republicano, que llegó el pasado viernes procedente de Washington, apareció vestido de oscuro con guantes blancos y una gorra también blanca con las letras USA, tanto andando como en un carro de golf.

A primera hora de la mañana, la Policía escocesa peinó los terrenos del complejo, situado en una tranquila localidad costera, para garantizar su seguridad antes de que el dirigente de la primera potencia mundial saliera a practicar su deporte favorito.

Según la agenda de la Casa Blanca, Trump no tenía compromisos previstos para este sábado, por lo que cabe suponer que se deleitó en su afición.

Mañana, domingo, el presidente estadounidense recibirá a Von der Leyen, con quien abordará un posible acuerdo arancelario entre EEUU y la Unión Europea que permita evitar una guerra comercial.

Ya el lunes, está previsto que se reúna también en Turnberry con Starmer, con el que analizará los aspectos pendientes del pacto bilateral que anunciaron en mayo, que reduce las tarifas para ciertas exportaciones británicas y amplía el acceso de productos agrícolas estadounidenses al mercado del Reino Unido.

Después de la reunión con Starmer, el mandatario se trasladará a Trump International, cerca de Aberdeen, en el noreste de Escocia, donde el martes inaugurará con su hijo un segundo campo de golf de 18 hoyos, de acuerdo con la Casa Blanca. Se espera que se le una el ministro principal del Gobierno escocés, John Swinney, con el que, además de jugar al golf, mantendrá una entrevista.

Swinney dijo que su Administración se plantea aportar dinero público para apoyar el Campeonato Nexo que se celebrará en Trump International este agosto.

“El golf y los eventos de golf son una parte fundamental de nuestra identidad nacional, pues apoyan a las comunidades, impulsan el crecimiento económico, contribuyen a la sostenibilidad ambiental en todo el país y promueven Escocia a nivel mundial”, afirmó.

Durante la visita de Trump, cuya madre era escocesa, la Policía ha puesto en marcha un amplio operativo de seguridad, que este sábado afrontó su primera gran prueba con protestas contra el presidente convocadas en Edimburgo y Aberdeen.