La última semana de mayo se celebra la Semana Europea Contra el Cáncer promovida anualmente por la Association of European Cancer Leagues (Asociación de Ligas Europeas contra el Cáncer) para impulsar la prevención de la que ha sido calificada como “la enfermedad de las enfermedades”, la detección precoz, el tratamiento y la calidad de vida de las personas afectadas por esta dolencia.
Según datos de la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC), el cáncer de cabeza y cuello ocupa el sexto lugar en incidencia en nuestro país, y cada año se diagnostican en España más de 12.000 nuevos casos, y, en la mayoría de las ocasiones, en estado avanzado.
La detección precoz ha demostrado ser fundamental para la supervivencia, mientras que en el estadio I es de más de un 80% los que logran superarlo, en estadios más avanzados (III-IV) sólo cerca de un 40%. Es por ello que el Doctor Ferreras, Director Médico de las Clínicas MAEX de Ferrol y A Coruña, recuerda que “el diagnóstico temprano es fundamental para mejorar la supervivencia de éste o de cualquier cáncer. La facilidad de la exploración clínica hace que, si todos de forma rutinaria fuéramos al menos una vez al año a nuestra clínica dental, y ante la sospecha de lesiones predisponentes nos derivasen con carácter urgente al cirujano maxilofacial o cirujanos de cabeza y cuello, conseguiríamos detectar tumores en estadios donde el pronóstico es fantástico. Creo que la población general se va concienciando de esta necesidad”.
Además de la detección precoz, según los datos del informe de Las Cifras del Cáncer en España 2023 de la SEOM (Sociedad Española de Oncología Médica), este tipo de tumores tienen una causa fundamentalmente ambiental o externa. “Clásicamente se ha asociado el cáncer de cabeza y cuello con hábitos tóxicos como el tabaco y el alcohol, con lo que una buena prevención primaria sería evitar estos factores de riesgos, que, por otra parte, también participan en la génesis de otros cánceres. La exploración rutinaria en las visitas al odontoestomatólogo de forma anual, es de gran ayuda en el screening inicial y detectar factores o enfermedades predisponentes de cáncer oral como pueden ser las leucoplasias, los líquenes…”explica el Cirujano maxilofacial José Ferreras.
En el caso de personas con factores de riesgo como grandes fumadores y bebedores se recomienda un seguimiento más exhaustivo. Una simple exploración por parte de un especialista puede diagnosticar tumores en estadios precoces, muchas veces asintomáticos. Cuando aparezcan heridas como placas, úlceras u otras lesiones que no mejoren en un plazo de tres semanas, se recomienda acudir al médico enseguida para descartar que sean síntomas de malignidad.
Además del tabaco (que aumenta el riesgo de tumores de cavidad oral, orofaringe, hipofaringe y laringe) y el alcohol (multiplica el riesgo de cáncer de laringe por 5), o ambos factores combinados, también existen otros factores de riesgo como una dieta con déficit de vitaminas (fundamentalmente A y C), una mala higiene bucal o algunas infecciones como la originada por el virus de Epstein-Barr (relacionado con el carcinoma de nasofaringe) o la del Papilomavirus 16 y 18 y otros serotipos (tumores de cavidad oral y de orofaringe).
Los cánceres englobados en los de cabeza y cuello (que no incluyen los tumores de la piel, cerebrales y tiroideos) son un grupo de tumores malignos localizados en los senos paranasales, nasofaringe, orofaringe (amígdala, paladar blando, base de lengua), hipofaringe, laringe, cavidad oral (mucosa oral, encía, paladar duro, lengua y suelo de boca), lengua y glándulas salivares. Cuando un paciente ha sido diagnosticado de alguno de ellos es fundamental que sea tratado lo antes posible y con las mínimas secuelas para el paciente.
“Hoy en día se pretende hacer todo en uno, desde el punto de vista quirúrgico. Este tipo de tumores precisan de un abordaje multidisciplinar (cirujanos, radioterapeutas, oncólogos médicos...)”, explica el Doctor Ferreras, al frente de las Clínicas MAEX de A Coruña y Ferrol donde se realizan tratamientos primarios y reconstructivos desde hace años.
“En los casos en los que la cirugía es la solución, o parte de la solución, somos partidarios de un tratamiento primario y el proceso reconstructivo en la misma intervención. Esto mejora de forma significativa la calidad de vida y acelera la recuperación de los pacientes”, concluye.