El próximo fin de semana comienza la carrera hacia las autonómicas. Será la primera vez que el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, encabece la candidatura del PP, lo que es visto como una oportunidad por parte del BNG de Ana Pontón y del PSOE de José Ramón Besteiro. Sin embargo, la encuesta realizada por DemosGal para Editorial La Capital señala que, a día de hoy, el Partido Popular alcanzaría por quinta vez consecutiva la mayoría absoluta en la cita del 18 de febrero.
En efecto: según los datos recabados, Rueda renovaría su mandato como presidente de Galicia al contar con una mayoría parlamentaria de 40 diputados, dos menos de los que tiene el PP en la actualidad. El estudio apunta hacia un ligero descenso de los populares con respecto a los últimos comicios, en los que el candidato fue Alberto Núñez Feijóo. Pero, de todos modos, el resultado previsto les permitiría a los populares retener en solitario el Gobierno de la Xunta, mientras el conjunto de fuerzas nacionalistas y de izquierdas sumarían en total 35 diputados.
El Bloque Nacionalista Galego sería la segunda fuerza más votada, aunque descendería ligeramente, al quedarse con 18 diputados, frente a los 19 que tiene actualmente. El PSdeG se beneficiaría del ‘efecto Besteiro’, pero solo ganaría un acta que le permitiría reunir en el hemiciclo autonómico 15 diputados. Además, el Parlamento Gallego incorporaría una nueva fuerza política, ya que, según la encuesta, Sumar entrará en el Hórreo con dos diputados, obtenidos en las provincias de A Coruña y Pontevedra.
El PP sería la lista más votada en las cuatro provincias gallegas, aunque perdería un escaño en las de A Coruña (13 frente a los 14 actuales), Pontevedra (10 en lugar de 11) y Lugo (8 actas en lugar de 9). Por el contrario, subiría un diputado en Ourense, al pasar a 9 en lugar de los 8 actuales). Por su parte el BNG mantendría en las provincias de Pontevedra, Lugo y Ourense el mismo número de escaños con los que cuenta actualmente, 6, 3, y 3 respectivamente; mientras en A Coruña perdería un escaño y pasaría a tener 6 frente a los 7 actuales.
Los socialistas subirían un escaño en las provincias de A Coruña (5 en lugar de 4) y Lugo (3 frente a los 2 actuales), mantendrían las 5 actas de Pontevedra y perderían un escaño en Ourense, pasando a 2 diputados en lugar de 3. Sumar entraría en el Hórreo con dos actas, obtenidas en las provincias de A Coruña y Pontevedra.
En lo que se refiere a la percepción que la sociedad gallega tiene de los candidatos a la presidencia, Alfonso Rueda es el más conocido (más del 88% de la población) seguido de Ana Pontón (77%) y José Ramón Gómez Besteiro (con casi el 63%), mientras menos de la mitad de los gallegos dicen conocer a Marta Lois, candidata de Sumar. Este orden se mantiene cuando pasamos a analizar la valoración que los gallegos hacen de los diferentes candidatos. Alfonso Rueda y Ana Pontón superan el aprobado, mientras no llegan a él Besteiro ni Lois. Como curiosidad señalar que la candidata de Podemos, Isabel Faraldo, que apenas supera el 12% de conocimiento, alcanza un 4,6 de valoración, lo que demuestra que ambas magnitudes no siempre están relacionadas.
Cuando se pregunta a los votantes quién creen que será el próximo presidente o presidenta de la Xunta, casi el 42% responde que Alfonso Rueda, el 11,3% Ana Pontón y solo el 2,7% apuesta por el candidato socialista, José Ramón Gómez Besteiro. Pero hay que tener presente que el 43% de los encuestados prefirió no arriesgarse a responder.
Según José Antonio López, director de DemosGal, “la encuesta muestra unas tendencias interesantes y presenta una política autonómica menos estática e inamovible de lo que a menudo se dice. El PP resiste, aunque debe prestar atención a la pérdida de escaños en provincias como A Coruña o Pontevedra, en los que las fuerzas de izquierda parecen coger un nuevo impulso”.
Con todo, los datos recogidos por DemosGal muestran que PP y BNG son las formaciones que mantienen una mayor fidelidad de voto en todas las citas electorales, con porcentajes que suelen superar el 80%. Una de las incógnitas de la próxima cita electoral pasa por comprobar si partidos como el PSdeG o Sumar, con un porcentaje mucho menor de fidelidad, consiguen en esta ocasión retener a votantes que en citas anteriores han optado por las papeletas de otras fuerzas políticas.
Para López “el ligero repunte de los socialistas, más la aparición de Sumar en el tablero, reduce la distancia entre las fuerzas de izquierda y el nacionalismo. El BNG desciende ligeramente, su ventaja sobre los socialistas se acorta y la presencia de Sumar aporta una nueva fuerza de izquierda no nacionalista al Parlamento”.
Sobre la posibilidad de que finalmente Democracia Ourensana obtenga escaño, los responsables de DemosGal mantienen la puerta abierta: “Ourense es hoy la provincia más difícil de cerrar. Parece claro que el PSdeG puede perder un escaño, pero la pelea por el mismo entre DO y el PP va a estar en un puñado de votos.” En cuanto a Vox, las encuestas indican que seguiría sin conseguir representación en la cámara gallega.
Por supuesto, todavía es muy pronto para descartar cualquier sorpresa, dada la enorme cantidad de indecisos. Sin embargo, es poco probable que Democracia Ourensana, Podemos o Vox consigan presencia en el hemiciclo gallego, aunque son ellos los partidos con más opciones de variar los resultados. De momento, los números le son favorables a Rueda, frente a un teórico bipartito que, en realidad, comienza a parecerse más a un tripartito.