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jueves | 25 abril | 2024
El 14 de marzo de 2020 la Junta de Cofradías de la Semana Santa de Ferrol iba a presentar la revista Ecce Homo. Cuando se anunció que ese mismo día iba a entrar en vigor el estado de alarma debido a la pandemia de coronavirus, los cofrades estaban descargando 16.000 procesionarios. “Tenemos otros tantos de este año y estos sí los vamos a repartir”, decía ayer César Carreño, presidente de la Junta, precisamente en la presentación del número actual de Ecce Homo, en el Casino, prácticamente dos años después de aquella fecha.
La pandemia estuvo presente en un acto que, junto con el Via Crucis y posterior procesión de la tarde, lanzó una Semana Santa que, esta sí, desea llenar las calles y que la máxima preocupación sea si llueve o luce el sol. La Junta de Cofradías y todos los intervinientes agradecieron “el trabajo de todas aquellas personas que nos han cuidado en estos dos años” y recordaron a “quienes nos han dejado”, en palabras de Fernando Iguacel, secretario de la Junta y presentador.
“Volvemos con nuevos bríos después de dos años de ausencia”, afirmó César Carreño. Avanzó los contenidos de una revista “que quiere ser un instrumento para conocer la Semana Santa de Ferrol, su pasado y su presente, para poder vivirla más intensamente”. Apuntó, como curiosidad, que “todos los actos de la Semana Santa de 1616 se van a hacer en la de 2022, y muchos más”.
Once artículos profundizan en la ceremonia del Desenclavo y Descendimiento, que el Santo Entierro recupera este año y que no se celebraba desde 1916; en el análisis de la capilla de la Merced como obra de Ucha Piñeiro; en la historia y realidad de la Orden Tercera; en la restauración de las iglesias de Dolores y de las Angustias; en la importancia de las procesiones para la devoción de las imágenes; en el nuevo San Pedro de la Cofradía de la Soledad; en las restauraciones del Cristo de los Navegantes y del Cristo de la Agonía; o en el análisis del Cristo de la Tahona, que ahora está ubicado en el Museo de la Semana Santa. También se recoge una entrevista al obispo de la Diócesis, Fernando García.
César Carreño explicó que en los procesionarios de este año, además de un código QR que dará toda la información complementaria sobre las procesiones, se incluye también una guía para seguir a los capuchones según sus colores y vestimentas algo que, comentó, pedían las personas que se acercaban a la Semana Santa desde fuera de Ferrol.
Destacó que en el Via Crucis de la tarde la imagen principal este año es el Cristo de los Cautivos de la Cofradía de Dolores y subrayó su cartel promocional, que incluye un dibujo de esta talla realizado por Liana Roca Castellón, portadora de la Virgen de la Esperanza.
El presidente de la Junta adelantó también que a finales de este mes se estrenará un boletín informativo de la Semana Santa que tendrá periodicidad trimestral e incluirá artículos y entrevistas.
El alcalde de Ferrol, Ángel Mato, mostró su “alegría enorme” al comprobar que “después de estos años tan complicados la Semana Santa vuelve con más ilusión que nunca”. Recordó el valor de esta celebración como evento cultural y económico, además del religioso. “Es un evento de atracción turística y económica para Ferrol y es una de las características más importantes de la cultura ferrolana”.
Se refirió además Mato a las cofradías, agradeciendo su trabajo. “Es justo reconocer la deuda que la ciudad contrae con ellas”.
Ana Lamas, diputada provincial, en representación de este organismo, habló de la vertiente más emotiva de las procesiones y destacó el “enorme impacto positivo que a Semana Santa ferrolá supón para a nosa cidade, a nosa comarca e a nosa provincia”.
La delegada de la Xunta de Galicia en Ferrolterra, Martina Aneiros, inisitió también en la satisfacción de “celebrar la Semana Santa después de dos años duros”. “Por fin ha llegado el momento de poder volver a ver las calles repletas de gente. Ferrol necesitaba recuperar la normalidad y recuperar el evento más importante de la ciudad en su dimensión religiosa, cultural y turística”, añadió.
