Dar movimiento al centro comercial y atraer al público a Parque Ferrol, que habitualmente tiene una clientela de mayor edad o familias con niños, es el objetivo de la iniciativa “Fashion market”. Así lo explica Sara Noguerol (@saranoguerolp con 33.800 seguidores), una de las cuatro “influencers” –aunque prefieren ser consideradas solo instagramers o blogueras– que ayer abrió su armario para compartirlo con los clientes y, de paso, hacer hueco para nuevas adquisiciones.
Junto a ella, Tania Gándara (@taniagandara con 14.000 seguidores) explica a algún cliente los precios de las prendas, que van desde un euro hasta 30, aunque alguna de las cuatro encargadas de la selección, como Laura Formoso (@laurafgandoy con 6.687 seguidores en Instagram), reconoce que “me he traído una cámara fotográfica que se vende por 400 euros, por si hubiese algún interesado”.
El cuarteto de mujeres que siguen las tendencias de la moda y así lo muestran en las redes sociales, lo completa Montse Gabrielle (@montsegabrielle con 18.100 seguidores en instagram)que explica que, además de vender y promocionar el centro, este evento ha servido para que se conozcan entre ellas, porque la amistad es, en muchos casos, solo “virtual”, es decir, se “siguen” pero no han coincidido las cuatro, hasta ahora, en ningún evento.
Entre las prendas que colgaban de sus burros, desde pantalones hasta cazadoras, deportivas, bolsos, gafas de sol, etc.
No se trataba de prendas de grandes marcas ni seleccionadas para pasarela, es la ropa cotidiana de estas jóvenes, que confirman que cada vez es más tendencia la adquisición de ropa de segunda mano. “Una vez que ya no te la pones, otro puede optar por ella”, explican. Además, la venta en plataformas como Vinted es una costumbre ya entre la juventud, por eso con este “Fashion market” no es más, indican, “que trasladar la venta on line a la presencial, para que los compradores puedan tocar y ver las prendas, además de ahorrarse los gastos de envío”.
La buena acogida del evento quedó demostrada con la afluencia de público constante en algunos momentos y a cuentagotas en otros, pero siempre con interés por ver, tocar y, casi todos, llevar.
La iniciativa es la segunda vez que se lleva a cabo en estas instalaciones comerciales y las participantes esperan que la propuesta pueda llevarse a otros espacios, tanto en Ferrol como en Narón, e incluso al centro de la ciudad.
Aunque reconocen que tras las Navidades y en plenas rebajas no es el momento óptimo para este tipo de mercados, lo cierto es que los bajos precios de muchas de las prendas y complementos han hecho que se produjesen bastantes ventas. Apuestan por “markets” una vez al mes. “Y así, liberamos un poco el armario...”