El grupo naval público Navantia reforzó ayer su apuesta por la salud de sus trabajadores con el anuncio de su adhesión a la Declaración de Luxemburgo, un documento de consenso desarrollado por la Red Europea de Promoción de la Salud en el Trabajo que sirve de marco de referencia para el bienestar laboral. Con la incorporación a este acuerdo, Navantia se compromete no solo a cumplir los principios básicos de salud para su plantilla reflejados en el mismo, sino también a la promoción de conocimientos y buenas prácticas en materia de salud laboral en las empresas de su entorno.
Los cuatro “ámbitos de influencia” que recoge el documento serían el ambiente físico –movilidad, seguridad vial, entorno de trabajo, etcétera–; psíquico –mindfulness, relajación o vías de comunicación–; recursos de salud –vigilancia y promoción, prevención primaria y vacunaciones–; y, finalmente, contribución a la comunidad –teletrabajo, conciliación, igualdad, etcétera–.
Continuidad
Tal y como detalló el grupo naval, esta adhesión es una continuidad del “compromiso adquirido por Navantia en 2019” mediante la campaña “Tu salud es lo primero”.
“El futuro de las empresas depende, en gran medida, de que su personal esté bien preparado, motivado y sano”, apunta la compañía. Además, señaló que al sensibilizar a los trabajadores también se influye en su entorno.