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sábado | 27 abril | 2024
La fábrica de “monopiles XXL” impulsada por Navantia y Windar en la factoría de Fene con la colaboración de Iberdrola continúa acumulando encargos. El último, anunciado ayer mismo, se trata de un contrato para la eléctrica de 45 unidades de cimentación, que irán destinadas a su complejo eólico británico East Anglia, concretamente al tercer parque de este macro proyecto.
Tal y como detalló el grupo naval a través de su filial de renovables Seanergies, la construcción de estos elementos se realizará íntegramente en la planta de Perlío y supondrá unas 900.000 horas de trabajo durante 15 meses. Según las estimaciones de la alianza empresarial, el contrato tendrá una capacidad generadora de 450 empleos, entre la empresa pública, la firma asturiana y las compañías auxiliares que asisten a ambas en su actividad.
En cuanto al proyecto en sí, la alianza detalló que las cimentaciones, como se mencionó, irán a parar al tercer parque del conocido como East Anglia Hub, que contará con una capacidad de 1.400 megavatios “suficientes para abastecer de energía limpia a 1,3 millones de hogares”, afirma la eléctrica. En este sentido, esta tercera parte del complejo supondrá el 48,2% del total de potencia instalada contemplada para el mismo –2.900 megavatios–.
“Este contrato supone un importante paso para la fábrica de Fene y para nuestra participación en el mercado de la energía eólica offshore, consolidándonos como fabricante que puede construir los tres tipos de cimentaciones de un parque eólico marino”, afirmó el presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, en referencia a que la factoría de Perlío desarrolla tanto “jackets” como cimentaciones flotantes y, gracias a estas nuevas instalaciones, también “monopiles”. A este respecto, el presidente ejecutivo de Windar, Orlando Alonso, apuntó a que esta planta fenesa “permite a nuestra alianza empresarial prestar un servicio de referencia mundial, del que Iberdrola será el primer beneficiado”.
Entrando en el encargo en sí, desde el binomio Navantia-Windar se destacó que las unidades tendrán unas dimensiones máximas de unos 84 metros de longitud –como referencia, la plaza de Armas de Ferrol tiene un ancho de 80,96 metros– y 10,6 de diámetro, así como un peso de 1.800 toneladas.
La consecución de un proyecto de este calado, apuntó la alizanza, es posible gracias a estas nuevas instalaciones –que supusieron una inversión de 36 millones de euros–, que cuentan, entre otros elementos, con una nave específica con maquinaria para curvar chapas de acero de gran espesor hasta un diámetro de 16 metros. A esto habría que sumar cabinas de pintado y una zona de almacenamiento para las unidades ya completadas.
Por último, desde Navantia Seanergies se quiso destacar la gran importancia para sus operaciones de su relación con Iberdrola, para la que ha desarrollado proyectos de cimentaciones durante los últimos nueve años en Europa y Estados Unidos por un valor superior a los 1.000 millones de euros
