Eloy Vázquez: “No considero que la carrera tenga tanta dificultad, pero hay que echarle horas”

Eloy Vázquez: “No considero que la carrera tenga tanta dificultad, pero hay que echarle horas”
Eloy Vázquez Fernández, delante de la Escola Politécnica de Enxeñaría de Ferrol (EPEF), donde estudia | emilio cortizas

Desde muy pequeño, Eloy Vázquez Fernández (A Coruña, 2001) tuvo fijación por los cachivaches que tuviesen entre sus componentes algún tipo de engranaje. Ya entonces le gustaba todo lo que tenía que ver con lo industrial, con la automoción y con las máquinas en general.
 

Por ello no fue ninguna sorpresa que se decantase por una ingeniería cuando llegó el momento de dar el salto a la universidad. Eligió la de Mecánica que se imparte en el Campus de Ferrol y allí afronta ahora el cuarto y último curso de un grado que no solo lleva al día, sino que lo hace de forma impecable.
 

Él es uno de los 434 universitarios –28 de ellos pertenecientes al campus ferrolano– que han alcanzado los premios de excelencia académica del curso 2020/2021 concedidos por la Consellería de Cultura, Educación, FP e Universidades con el fin de reconocer el trabajo de las personas que obtuviesen la mejores calificaciones –más de un nueve en su caso– en cada uno de los cursos del grado oficial en el Sistema Universitario de Galicia, excepto en el último, en el que el gobierno gallego concede los de fin de carrera. Lleva los estudios año por año, lo que conlleva un gran esfuerzo y sacrificio, “pero es lo que hay que hacer; tampoco considero que la carrera tenga tanta dificultad, pero sí hay que echarle muchas horas”, reconoce.
 

Expectativas

El Grado de Ingeniería Mecánica está cumpliendo sus expectativas, sobre todo porque “hay muchas cosas que me gusta estudiar; y al resultar atractivas las materias, pues te resulta llevadero”, dice. Destaca la gran cantidad de ofertas que se reciben en la escuela por parte de empresas dirigidas al alumnado para la realización, por ejemplo, de prácticas para empezar a trabajar.
 

Él, que todavía no ha probado la experiencia laboral, tendrá que decidir este curso hacia qué especialidad enfocará su perfil profesional. Lo hará a través de un máster, aunque a estas alturas del curso tampoco tiene claro si quedarse en Ferrol para realizar estos estudios o hacerlo en el extranjero, que “también te permite ver más mundo, conocer más gente y tener otra visión de las cosas”, comenta. Frente a otros compañeros que se desplazan diariamente desde diferentes municipios o ciudades como A Coruña para realizar sus estudios en Esteiro, este joven herculino ha optado por residir en la ciudad naval.
 

Pandemia

Sin embargo, su experiencia tanto en la ciudad como en el campus se ha visto fuertemente condicionada por la irrupción de la pandemia. “La verdad es que fue todo un poco raro porque me cogió el tema del covid por el medio. Estaba en primero de carrera, empezando el segundo cuatrimestre, cuando empezó el confinamiento. A partir de ahí el curso fue online; el segundo curso telemático compaginado solo con unas pocas horas presenciales; y el tercer curso presencial pero con los protocolos que estipulaban grupos reducidos, distancia mínima, uso de mascarilla... Realmente este es el único curso que considero, o espero, que vaya a ser normal”, manifiesta. De la ciudad destaca “los sitios chulos que hay por aquí y que te permiten escapar un poco del ambiente académico. Me considero afortunado de poder, por ejemplo, ir a correr a la playa para desconectar un poco en época de exámenes o disfrutar tomando algo en una terraza”, destaca.
 

Proximidad

Con respecto al Campus, valora la proximidad que hay entre los compañeros al ser un espacio con poco alumnado en comparación con otros campus de mayores dimensiones. Y eso que este curso en su centro, la actual EPEF (antigua EPS) el número de alumnado se ha visto considerablemente incrementado tras la integración de las dos escuelas politécnicas en Esteiro. “Está bien, porque los de Serantes estaban allí como más aislados, pero ahora, me imagino que por ser el primer año, está siendo más difícil compaginar horarios. En mi caso, por ejemplo, los jueves tengo diez horas de clase seguidas y los viernes no tengo ninguna”, cuenta. 
 

Como todos los demás estudiantes galardonados en la convocatoria de la Xunta, Eloy Vázquez, que juega al rugby en el CRAT de A Coruña, recibirá un premio de 1.000 euros y un diploma acreditativo.

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