12º-17º
domingo | 19 mayo | 2024
El importante día para la ciudad del que el alcalde, Ángel Mato, se mostró muy satisfecho por haber puesto punto final a un convenio que llevaba años sobre la mesa, tendrá además de méritos o deméritos de distintas corporaciones mucho que ver con el futuro desarrollo de la ciudad, por lo que supone desde el punto de vista urbanístico.
Aunque de la decena de propiedades que serán municipales todas pueden ser interesantes, la parcela del Sánchez Aguilera, con 90.000 metros cuadrados en un punto estratégico de la ciudad, es, sin lugar a dudas, la que supondrá el mayor cambio urbanístico en Ferrol.
El alcalde, Ángel Mato, valoró esta posibilidad como “o máis grande proxecto de desenvolvemento urbano en 50 anos, que pode desfacer o tapón urbanístico do Sánchez Aguilera, permitirá á cidade contar con espacios públicos, resolver temas de mobilidade, zonas verdes e espacios dotacionais”.
Así las cosas, en el convenio el Concello, como explicó Mato, se reserva la capacidad de poder desarrollar el proyecto de urbanización y tutelarlo, mientras que será defensa quien pague el coste de viales y zonas verdes.
Ahora, se abre un camino de trabajo conjunto para crear “un nuevo barrio” que ofrece muchas posibilidades entre las que se baraja una sede judicial, ya que Ferrol es la única gran ciudad que no dispone de ella; espacios deportivos y culturales, que unido a la construcción de una residencia, conviertan el Sánchez Aguilera en un pilar fundamental para el crecimiento del Campus de Ferrol; espacios dotacionales públicos como un centro de día para las personas mayores del casco historico, además de 17.000 metros curados de zona verdes que constituirían un parque urbano del siglo XXI.
Con el desarrollo urbanístico de esta pieza, se abre el camino hacia la construcción de la estación intermodal, una nueva entrada desde Canido o la suturación de barrios como Serantes, Catabois o Canido.
No hay que olvidar tampoco que la parcela contempla usos residenciales, un espacio comercial y una plaza en la que se incorpora un parking subterráneo.
Pero además de la codiciada parcela, son nueve más las propiedades, algunas de mayor tamaño incluso que el acuartelamiento, que pasan al Concello y para las que habrá que definir un plan de usos.
La larga tramitación del convenio –el segundo más antiguo que tiene para su ejecución el Invied– ha hecho que se hayan propuesto y barajado muchos usos para las distintas propiedades de la zona rural, que deberán ser definidas y para las que ya se han alzado voces reclamando que se tenga en cuenta la opinión ciudadana.
Entre las instalaciones para la que más se han avanzado usos está el campamento de Covas, donde se planteaba un espacio de ocio y turismo, con zona de acampada, albergue y espacio de autocaravanas, con actividades didácticas, preparación de rutas, etc.
Pero Monteventoso también tiene un futuro prometedor, ya que forma parte del proyecto de la Diputación para baterías de la costa de Ferrol, Ares y Valdoviño a las que se dotará de valor turístico con un plan director en colaboración con las tres administraciones locales.
Espacios como el polvorín de Mougá, para el que se planteó en su día la puesta en marcha de una aldea rural de turismo familiar; el cuartelillo de San Luis, como parque urbano de Canido; la zona verde de Catabois; además de una actuación blanda en la zona del polígono de tiro son algunas de las propuestas que ahora habrá que perfilar con un plan para cada una de la decena de nuevas propiedades.
Con este acuerdo, en palabras del alcalde, se consigue la devolución del Ministerio de Defensa a la ciudad de una parte de lo que utilizó en el pasado con fines militares y que pasa ahora a manos de los ferrolanos.
