La suspensión anunciada la semana pasada de parte de los conciertos en la calle organizados para los meses de julio, agosto y septiembre por la Asociación de Empresarios de Hostalería de Ferrol e Comarcas por las quejas de un reducido grupo de vecinos tomó por sorpresa a la ciudad. A pesar de que la iniciativa se había diseñado para minimizar las molestias a los residentes de los barrios, una parte de los habitantes se mostraron contrarios al uso particular de espacios públicos, presentando hasta once quejas en el Concello.
Ante esta coyuntura, el regidor de Ferrol, José Manuel Rey, avanzó este lunes que desde el Concello se está intentando mediar en el conflicto y alcanzar un punto de entendimiento entre ambas partes. De este modo, mientras el edil de Festas, Arán López, mantiene conversaciones con los hosteleros, el teniente de alcalde, Javier Díaz, hace lo propio con los vecinos. Así, Rey Varela abogó por el entendimiento, señalando que, como alcalde, debía hacer un llamamiento a que “todos debemos renunciar a un pouco para que todos estemos medianamente satisfeitos”.