La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, ha apuntado antes se cantaba "qué fatalidad, que la madre de Fraga (histórico líder del PP) no pudiera abortar" en relación a la polémica surgida por el vídeo que la secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez 'Pam', subió a sus redes sociales y luego eliminó, en el que podía escucharse a un grupo de jóvenes cantar "¡Qué pena que la madre de Abascal no pudiera abortar!" en la manifestación del 8M en Madrid. No obstante, entiende que el vídeo pueda paracer "inadecuado" en razón del cargo que ocupa.
"Yo estaba en la manifestación al lado de la secretaria de Estado y ayer comentaba Cristina Almeida que esa cántico en nuestra época era 'qué fatalidad, qué fatalidad, que la madre de Fraga no pudiera abortar'. Es un cántico que lleva 50 años ahí, a mi lo que me sugiere es que quizá cada vez estamos haciendo más caso a los reaccionarios o que la sociedad pretende escandalizarse en vez de por las violencia sexuales o por la falta de derechos de las mujeres, por las frases que dicen las jóvenes, pero también sus madres, y si me apuras sus abuelas", ha señalado antes de participar en un acto en el Museo del Traje.
En su opinión, lo importante es no "oscurecer" el 8 de marzo porque "cada año" parece que quiere oscurecerse con algo. "En 2020 porque éramos las causantes prácticamente de que la pandemia de 2019 viniera a España y este año por este vídeo que en realidad no es la secretaria de Estado la que corea eso, son las jóvenes que van detrás de ellas, aunque ella lo grabara. Yo entiendo que hay gente a la que le puede haber parecido inadecuado por el cargo que ocupa", ha dicho preguntada por si la número dos de igualdad debería pedir perdón.
En todo caso, ha insistido en el "reaccionarismo colectivo" en el que las cosas que se cantaban hace 50 años ahora "causen este pretendido escándalo o esta pretendida ofensa".
"Si alguien se ha sentido personalmente ofendido yo creo que no cuesta tampoco decir que sientes si alguien se ha sentido aludido, pero es que yo vi pancartas contra la RAE, gritos contra la Conferencia Episcopal -ha reiterado-. Las manifestaciones sirven para eso, y el grado de libertad de un país se mide por la tolerancia frente a quienes están ocupando un espacio publico para reclamar derechos.
Preguntada por la posibilidad de que algunos padres de las jóvenes grabadas se hubieran quejado a Podemos por la difusión de su imagen al ser menores, la delegada del Gobierno ha apuntado que no le consta que hubiese menores, pero también ha precisado que si las menores prestan su consentimiento a partir de una edad en la que tienen suficiente madurez, tienen su propio derecho, tal y como recogen las leyes "desde hace muchos años" y también ahora la Ley de Protección a la Infancia.
"Si deciden salir a la calle su derecho a la propia imagen no lo tiene ya sus progenitores. Jurídicamente, a veces ustedes (en referencia a los medios e comunicación) plantean cosas que no tienen ningún sustrato", ha criticado.
En este sentido, ha insistido en que no hay ninguna menor expuesta que no se hubiera expuesto a si misma, que sabe que la están grabando y que está haciendo uso de su libertad de expresión porque "la infancia en España tiene sus propios derechos. En su opinión, si hubiese habido alguna queja de sus padres, estarían buscando "opacar" los derechos de las mujeres feministas, a los gobiernos feministas y a las políticas feministas.
"Me parece de verdad un poco sorprendente que se pueda poner el micrófono a unos padres a ver si pueden decir algo respecto de que sus hijas voluntariamente salgan en una manifestación feminista", ha sentenciado.
Por otro lado, respecto a la instrucción de la Fiscalía General del Estado en torno a las rebajas de penas por la Ley del 'sólo sí es sí', cree que es "muy importante" que se indique al ministerio Fiscal y que da pistas en el ámbito jurídico, de investigación y del juicio tanto a la abogacía como "incluso" a la propia judicatura.
En todo caso, ha recalcado que las revisiones, de las que "algunos están haciendo contadores bastante ficticios", no son firmes. "Jamás hemos computado sentencias no firmes y menos el CGPJ y hay una cierta tendencia muy clara a la alarma social y al terror sexual para volver al viejo sistema", ha puntualizado.
Así, ha apuntado al PP como el primero que propuso una vuelta al sistema anterior con las primeras revisiones, presentando una proposición de ley que, según ha subrayado, es precisamente volver al viejo sistema. "Esto es lo que esta ahora encima de la mesa y creemos que no hay que legislar a golpe de titular ni de alarma y que sobre todo hay que tratar los datos como lo que son. Cuando sean datos de sentencias firmes revisadas, entonces veremos si realmente han bajado algunas penas, si no revoca el Supremo la mitad de estas rebajas, si realmente son revisiones y no recursos", ha argumentado.