Javi Leira cierra con su salida del Valdetires una etapa de dos temporadas al frente del conjunto ferrolano, de Segunda División. El técnico comunicó recientemente al club su intención de no continuar por no darse las “condiciones necesarias” para hacerlo. 

Leira explicó ayer que se trata de una decisión muy meditada y que, entre otros aspectos, se basa en la necesidad de “descansar mentalmente” tras dos campañas muy duras en las que, pese a las dificultades, ha sido capaz de conservar su plaza en la categoría de plata del fútbol sala femenino.

“Fueron dos temporadas complicadas”, señaló, “muy condicionadas por la falta de jugadoras”. Esa escasa rotación, unida posteriormente a las lesiones –principalmente la de su capitana Erika–, se tradujeron en una segunda vuelta muy floja. Uno de los problemas fue la imposibilidad de inscribir a las jugadoras sudamericanas que se fichó a comienzos de temporada debido a contratiempos con los visados. “Yo sé que de cara a esta segunda temporada la directiva hizo un esfuerzo”, reconoció, “pero no tuvo resultados porque no pudimos contar con ellas”. 

Según ha podido saber este periódico, cuatro equipos de fuera de Galicia han contactado con el preparador, pero su futuro sigue en el aire.