Al menos, A Malata vio un gol y una victoria más del Racing. En el penúltimo partido que se juega en este escenario esta temporada, el equipo ferrolano resolvió con triunfo el encuentro que lo enfrentó al Cádiz, lo que le garantiza acabar el campeonato en la penúltima posición –aún le falta por asegurar que no va a ser con récord negativo de goles–. Es un mal menor a nivel colectivo para la escuadra de la ciudad naval y también para el goleador del choque, un Chiki que al menos estrena su cuenta de la temporada con este tanto.
 

Dado que el partido no tenía demasiados alicientes –el Racing ya certificó su descenso hace varias semanas, mientras que el Cádiz está salvado y sin opciones de meterse en los playoffs de ascenso a Primera–, al menos ambos contendientes protagonizaron un espectáculo bastante atractivo. Con escasas precauciones defensivas, las llegadas fueron constantes, más por parte del cuadro verde –por mediación de Nacho Sánchez, Heber Pena o Fran Manzanara, cuyos tiros no cogieron puerta– que por la del Cádiz –que se limitó a un disparo de Brian Ocampo despejado por Jesús Ruiz–.
 

Estas buenas perspectivas, sin embargo, no llegaron a nada más. De hecho, con el paso de los minutos las llegadas a cualquiera de las porterías empezaron a escasear y el juego pasó a desarrollarse mayoritariamente en el centro del campo. Ahí, a los dos equipos les costaba encadenar varios pases seguidos y la profundidad era más bien escasa, por lo que el partido se encaminó al descanso sin grandes sobresaltos y todo por decidir para la segunda parte del choque.

Empuje

No cambió demasiado el decorado entre el final de la primera parte y el comienzo de la segunda, así que el partido siguió con el ritmo bajo con el que estaba. Si acaso, el Cádiz dio un paso adelante en su planteamiento –también con el cambio realizado y la entrada de Melendo– y empezó a jugar más cerca de la portería defendida por Jesús Ruiz. Así llegó su mejor ocasión, una colada de Rubén Sobrino, cuyo tiro fue rechazado por el meta racinguista, pero lo único que provocó este fue la reacción de la escuadra local.

Así que el encuentro derivó en un carrusel de idas y venidas con nuevos protagonistas sobre el terreno de juego. En cuanto al Racing, la entrada de Chiki permitió a la afición mostrar su enfado con el delantero madrileño, que en sus acciones confirmó lo poco que ha aportado al cuadro verde en lo que va de temporada, lo que junto a algunos gestos con la afición lo han convertido en un personaje poco simpático.
 

Pero, cosas del karma, Chiki fue el encargado de resolver el partido. Una acción de Josep Señé fue cortada con la mano dentro del área por Víctor Chust. Por aclamación popular, el penalti fue lanzado, y transformado, por el delantero. Y a pesar de que el cuadro gaditano trató de reaccionar y conseguir al menos el empate, el resultado se quedó con los tres puntos para el Racing como pequeño respiro para esta temporada. 

FICHA TÉCNICA