A Coruña está presente en Fitur, al igual que resto de las ciudades gallegas, presentando unas ofertas muy atractivas y que, la verdad, atraen a muchos visitantes. Acciones culturales, musicales, sociales y deportivas... la oferta es enorme. Ahora bien, es bueno que los dirigentes locales presten mucha atención a que los turistas se ‘enganchen’ a Marineda, que ya lo hacen con la fachada marítima de la que presumimos. Pero no solo hay que quedarse ahí. La ciudad tiene muchos otros atractivos, como sus barrios y sus peculiaridades. Ahí las asociaciones de vecinos deberían y tienen que jugar un papel fundamental, que al mismo tiempo es vital. Sus demandas, denuncias o reclamaciones (vamos a llamarlos X) deberían ser analizadas y tenidas en cuenta. Tenemos concejalías, pero el de la participación ciudadana debería de ser la estrella, porque ese contacto directo ayudaría a palpar el latir de la ciudad para mejorar la calidad de vida y tener una urbe actualizada cumpliendo sus expectativas.