El Paso do Cantiño, en A Illa de Arousa, presenta unas grietas fuera de lo común. El efecto de la erosión del mar ha hecho mella en la estructura y desde el Ayuntamiento temen que en cualquier momento pueda venirse abajo parte de la misma, por lo que urgen, como no podía ser de otra manera, una solución a Portos de Galicia, que es quien tiene las competencias sobre este tema. Desde el Concello levantan el dedo acusador contra el ente público al considerar que una de las causas de este deterioro se debe a la falta de mantenimiento y limpieza de una zona estratégica en el municipio isleño. Ante esta situación a la Administración no le queda otra que actuar ya porque este problema puede ir a más y entonces es posible que haya que precintarlo para que no pase una desgracia. Y nadie quiere eso.