Ya estamos con las grandes promesas electorales. El anuncio de Sumar Galicia propone la creación de una renta “universal” para los jóvenes de entre 18 y 30 años que recibirían un apoyo mensual de 600 euros para favorecer su emancipación, formación y capacidad de inserción en el mercado laboral, así como para velar por su “salud mental”. Esta renta “universal” para la que no habría que cumplir “ningún tipo de requisito” más allá de tener entre 18 y 30 años, sería puesta en práctica a través de un programa piloto durante cuatro años en el que participarían 10.000 jóvenes, de los cuales, la mitad recibiría 600 euros al mes y la otra no. En una palabra, un experimento. Se supone que las administraciones en lo que deberían esforzarse es en ayudar a los empleadores a hacer ofertas de trabajo con una remuneración digna, pero no facilitar ‘subvenciones’ de forma altruista, ya que así lo único que se consigue es dar dinero gratis a cambio de esfuerzo cero. Otra cosa es que se oferten ayudas a aquellos que trabajen para formarse más.