CUALQUIERA que haya probado la Maruxas de Nata ha regresado por un instante a sus más tiernos años. Las Maruxas son naturales, elaboradas con materia prima de la tierra, con receta tradicional y con la suficiente mesura para conservar el encanto de lo artesanal. La apuesta por la pequeña producción tiene, por necesidad, premio. Y ayer la Xunta se fue a San Sadurniño a incorporar oficialmente a este obrador a la relación de empresas adheridas al sello de calidad Artesanía Alimentaria. Excusas. En realidad, José Luis Cabarcos y Martina Aneiros fueron a comerse unas cuantas Maruxas.