Dice el Código Civil que las fuentes del ordenamiento jurídico son la ley, la costumbre y los principios generales del Derecho. Por ese orden. La costumbre como fuente de Derecho está en la base de gran parte de las normas que ahora se recogen por escrito: Que te paguen por trabajar, que nadie pueda atentar contra tu vida, que tengas que alimentar a tus hijos. El poder de las normas consuetudinarias queda patente estos días en la calle Arzobispo Lago de Vilagarcía. Hasta hace nada había allí unos contenedores, que se han tenido que trasladar mientras se obra en este tramo. La fuerza de la costumbre es tan poderosa que la basura sigue depositándose allí. Donde siempre se hizo. ¿Que huele mal? Sí. Pero, ¿y la belleza de la metáfora jurídica? ¿Eh? A disfrutarla.