Ferrol tiene una fortificación en la ría digna de ser patrimonio mundial y , sin embargo, dista mucho de  tener la importancia que se le da a otros castillos que, de menos valor, lucen por las distintas ciudades y pueblos. Los difíciles accesos condicionan las visitas, pero aún así son numerosos los turistas que quieren conocer esta joya. La importante remodelación a la que se verá sometida promete ponerla en el lugar que le corresponde y, además, con servicios como cafetería.