Nadia Calviño ha hablado alto y claro: “No voy a volver a participar en un debate en el que sea la única mujer”. Y las manos se arrancan solas a aplaudir el alegato feminista que quizá no muchos esperaban pero que, precisamente por venir de quien viene, puede resultar infinitamente más efectivo que otros. La ministra participaba en el encuentro ‘España en la Europa del siglo XXI’, nunca más adecuado para lanzar el mensaje de que dejar fuera a las mujeres es correr un “riesgo de involución”. Esperemos que hayan tomado nota empresarios, jefecillos y machistas con cargo, así en general.