En A Coruña también se está librando una guerra, menos cruenta pero más apestosa, en la que los vecinos sufren las consecuencias sin saber siquiera por qué. Después de una semana de sabotaje al servicio de recogida de basura, con ruedas pinchadas, camiones incendiados y contenedores reducidos a cenizas, la alcaldesa ha declarado la emergencia sanitaria y ha contratado una nueva empresa para retirar los desperdicios que se acumulan en la calle. Atajamos el problema más urgente. Ahora estaría bien enterarse de cuál es el motivo de los ataques, y, con un poco de suerte, solucionarlo. FOTO: Basura en las calles coruñesas | J. Alborés