Dos semanas, dos finales, una en casa y otra fuera, es parte de la senda que le espera al Intasa en este mes de diciembre que, sin duda, se presenta como casi decisivo de cara a conocer si el conjunto de San Sadurniño todavía tiene futuro entre los mejores equipos nacionales.
La formación dirigida por Agustín Rodríguez tirará de valentía para el encuentro que esta tarde le espera ante el Ibiza Ushuaïa Voley –19.30 horas, Municipal de San Sadurniño–, una formación, que al igual que los locales, se encuentra, en esta recta final de la primera vuelta, inmersa en una zona baja de la tabla clasificatoria en la que, sin embargo, es el tuerto en el país de los ciegos.
De hecho los insulares cuentan con solo un triunfo en su casillero, si bien este se logró ante la otra de las escuadra que quiere evitar las últimas plazas al final de la liga, el Leleman Valencia. La buena noticia para los locales es que este primer combate por la salvación se jugará en casa, con el apoyo de una afición –de hecho los socios tuvieron la opción de retirar una invitación gratuita–, “va a ser un buen partido y espero que haya un gran ambiente, todos tenemos muchas ganas”, señalaba ayer el preparador argentino.
Con la presión repartida tanto en al campo local como en el visitante, desde las filas del Intasa los suyos se encuentran “muy motivados y esperando que todo lo trabajado durante los entrenamientos se lleve al campo”, señala el entrenador local sobre un partido que, nadie lo duda, “se espera largo y difícil”, con la fortaleza mental y la “valentía” de los deportistas como clave para llevarse algo de este antepenúltimo encuentro de la primera vuelta de Superliga. Rodríguez incide en que aquel que controle la ansiedad y los nervios propiciados por la situación de ambos equipos será el que se lleve el gato al agua. Un encuentro en el que el argentino podrá contar con todos los suyos, toda vez que el internacional Verdi está recuperado de las molestias sufridas en el duelo de la pasada semana ante el Río Duero Soria.