a este paso, el espacio rupturista de En Marea va a ser el más reconstruido de la historia de la humanidad. El último en sumarse a esta idea de recomponer los muebles es Antón Gómez-Reino, que ahora fija la mirada en las autonómicas después de los sendos varapalos que para ellos han supuesto las generales y las autonómicas. Lo que tendrían que arreglar Gómez-Reino y los suyos son las ansias desmedidas de cada formación integrada en En Marea por controlar el partido e imponer sus ideas. Son ellos, con sus puñaladas traperas, los que están torpedeando la formación desde dentro. Y los ciudadanos se han dado cuenta. FOTO: Antón Gómez-reino | aec