el virus amenaza con fastidiarle la estrategia electoral al PSOE en Cataluña. Lo tenía todo calculado: el anuncio por sorpresa de Illa como candidato, las primeras encuestas en las que el factor ministro lo colocaría en la mejor posición, la campaña y, casi sin tiempo de darse cuenta, la votación. Pero si algo deberíamos haber aprendido es a no hacer planes. La posibilidad de un pico de contagios e ingresos en la UCI aboca al retraso electoral, por el que apuestan todos los partidos catalanes, menos el PSOE. Aluden a la seguridad de los ciudadanos. A ver si no se les olvida cuando organicen mítines multitudinarios. FOTO: el ministro-candidato | efe