“Ojalá tuviéramos un Monte Arucas aquí cuando se hundió el Prestige”

El revuelo que originó la aprobación del servicio de \“búnkering\” en la ría de Ferrol y la posterior llegada del \“Monte Arucas\” para realizar las operaciones de suministro de combustible a otros barcos coincidió con el conflicto con Gibraltar y los anuncios del Gobierno sobre las limitaciones a las gasolineras flotantes que operan en el Estrecho. Es por ello que, según la propietaria del barco, la empresa Sertosa Norte, se extendió entre la ciudadanía cierta confusión sobre la actividad de los buques que tienen entre sus funciones la transferencia de gasoil y fueoil.
La realidad, explican Gustavo Boado y el capitán del barco, Aitor Fernández, es que ambas actividades poco tienen que ver. \“La diferencia entre una gasolinera flotante y un buque como este\”, apunta Boado, \“es que el almacenamiento del combustible en este caso está en tierra –en concreto en las instalaciones de Forestal del Atlántico– y no en un barco como el caso de Gibraltar, por lo tanto, somos nosotros los que cargamos combustible en la terminal y lo distribuimos al barco que lo requiera, pero nunca se almacena en el mar\”. Las operaciones, explica el capitán, se han desarrollado del siguiente modo hasta ahora: \“Nos abarloamos a un barco amarrado al muelle y entonces le suministramos\”.
Otro de los aspectos diferenciales, si cabe el que más, entre un buque como el \“Monte Arucas\” y las gasolineras flotantes que operan en Gibraltar es que el primero desempeña funciones anticontaminación. Así, el barco propiedad de Sertosa Norte ha ganado un concurso de la Agencia Europea de Seguridad Marítima, la EMSA, para incrementar la protección medioambiental en la franja litoral que se encuentra entre Galicia y Le Havre. \“Estamos a disposición de la EMSA en caso de necesidad –recuerda Boado– de que se produzca un episodio de contaminación marítima que podríamos combatir con este barco, uno de los pocos que hay en el mundo para este tipo de contingencias\”. En estos momentos, señala el representante de Sertosa Norte, no hay en Europa más de media docena de buques provistos de los equipos, sistemas y personal para hacer frente a un episodio de estas características. \“Ojalá lo tuviéramos aquí cuando se hundió el Prestige\”, dice.

labor comercial
Las críticas a la llegada de este buque a la ría aludían a la \“contradicción\” que podría existir entre las dos funciones del \“Monte Arucas\”, la lucha contra la contaminación y el suministro de combustible a buques. Sin embargo, comenta Gustavo Boado, no existe tal incongruencia. \“Como el servicio anticontaminación no es suficiente para amortizar la inversión en un buque como este, la EMSA exige que tengas una actividad comercial y pensamos que el \“búnkering\” se adaptaba a las características de este barco\”.
En ese sentido, el armador tuvo que acometer una serie de reformas de calado con el objetivo prioritario de \“mejorar su maniobrabilidad, incrementar su velocidad y su capacidad para el bombeo de combustible y el manejo del equipamiento\”. Solo de ese modo la actividad del \“Monte Arucas\” podría ser rentable.
Hasta el momento, el barco, fletado por la petrolera Cepsa, ha realizado tres servicios. n

“Ojalá tuviéramos un Monte Arucas aquí cuando se hundió el Prestige”

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