Zarpa hacia Australia el último buque construido en Navantia

Tras sonar el himno de Australia y el de España y largar las estachas, el buque de aprovisionamiento en combate "Stalwart" dejó Navantia para poner rumbo hacia Asutralia, a donde llegará tras una navegación de más un mes de duración.

Este hito, celebrado en la factoría ferrolana, contó con la presencia de la embajadora australiana Sophia McIntyre, que estuvo acompañada del presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, así como del director del astillero ferrolano, Eduardo Dobarro, y supone un motivo de celebración, al echar al mar una construcción realizada por Navantia, pero también de tristeza o incertidumbre, al no contar con carga de trabajo de obra nueva hasta la próxima construcción de las fragatas F-110.

Por eso, los trabajadores del naval se concentraron también mostrando pancartas  en las que se solicitaba carga de trabajo y ante las cuales se detuvo el propio director de Navantia para pedirles confianza en los próximos proyectos que se buscan para el astillero.

En este sentido, Domínguez reconoció el "especial esfuerzo" de los trabajadores y aseguró que la F-110 será "la palanca de crecimiento y empleo", manifestando su compromiso con el "futuro del astillero de Ferrol".

La embajadora australianadeseó "buen viento para su viaje" al AAOR y ratificó los lazos de unión entre España y Australia, habiendo confiado  Navantia la "columna vertebral" de su Marina de Guerra, en una relación que espera que no sea el final con la construcción de este buque, ya que el astillero ferrolano estará vinculado al mantenimiento de los buques.

Por su parte, el director del astillero destacó Navantia como empresa colaboradora de la Marina australiana y tuvo un especial reconocimiento para los que lograron esta obra, pese a la situación de pandemia vivida.

El delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, acudió también al acto y destacó "que a culminación do contrato de buques de aprovisionamento para a Real Mariña Australiana sitúa aos estaleiros de Navantia en Ferrol na cabeza mundial do sector naval da Defensa".

La marcha del "Stalwart" suena también a lamento porque no hay buque de sustitución en el horizonte, además de que no están, por el momento, sobre la mesa las posibilidades de tranformación el Galicia, un sustituto del Patiño y ni siquiera el dique cubierto. Los trabajadores piden un reparto lineal del trabajo para no tener que depender de picos concretos como el que se espera que haya con la construcción de la futura de la F-110.