Tanto Partido Popular como Ferrol en Común ya han dado a conocer las alegaciones que han presentado a la Ordenanza de Tráfico, Circulación e Seguridade Viaria, en la que trabaja el ejecutivo local con la intención de que pueda entrar en vigor este mismo año.
Ambas formaciones coinciden en que la norma deja en manos del alcalde decisiones que consideran que deberían ser tomadas por el pleno. Así, el concejal popular Javier Díaz señaló que “no aceptamos la política de ordeno y mando, de imposición, de decretazo que pretende Mato ya que por encima de los intereses partidistas están los vecinos, los comerciantes y los hosteleros a los que nosotros sí hemos escuchado”.
Así, alude a que la ordenanza recoge expresamente que corresponde al alcalde o concejal delegado, mediante decreto, la ampliación o modificación de las vías declaradas de estacionamiento con horario limitado, o que el ámbito de aplicación de la ordenanza es el definido en los anexos de la misma sin perjuicio de modificaciones, reducciones o ampliaciones que pueda decidir el regidor, algo que debería corresponder al pleno, como voz de los ferrolanos. También, desde FeC se explica que esa competencia para establecer las zonas y vías peatonales debe ser competencia plenaria y no del regidor. Propone, asimismo, que se promueva de forma inmediata una mesa de trabajo para que lo relativo a las zonas peatonales o de aparcamiento “non queden soamente coma texto dunha ordenanza” y afea al ejecutivo la “falta de transversalidade que se amosa” y el no acompañarse de un presupuesto y un cronograma.
Ambos grupos municipales incluyen en sus propuestas una rebaja de las sanciones, ante la situación económica que se está viviendo. Los populares piden una rebaja dentro de los límites legales y FeC apuesta por una rebaja de las multas por aparcamiento irregular de 200 a 100 euros, “xa que consideramos que cumpre o mesmo fin disuasorio e na crise socioeconómica que vivimos e máis acorde coa situación actual”.
Más allá de los puntos en común, los populares –“tras haber escuchado a los vecinos, comerciantes, hosteleros y taxistas”, apuntan– critican que la ORE pretenda “un cierre perimetral encubierto del barrio de A Magdalena, reduciendo los accesos al centro de la ciudad” y exigen la retirada de puntos como los relativos a los peatones, como el punto 18.1 y el 18.4 (que impide detenerse en las aceras formando grupos que impidan la circulación del resto de peatones o esperar el bus fuera de las marquesinas).
Asimismo, piden que los horarios de las zonas de carga y descarga sean en horario partido como hasta ahora de 8.30 a 11.30 y de 16.30 a 18.30 horas o que la calle Magdalena sea peatonal desde Rubalcava a Coruña de 11.00 a 23.00 horas.
La consideración de los trabajadores del centro como residentes a la hora de contar con zonas de aparcamiento o el incremento de zonas azules son otras cuestiones que plantea el PP en sus alegaciones.
Por su parte, FeC apunta, además, la necesidad de recuperar la Escola de Mobilidade de FIMO, o la eliminación de artículos como el 20.3, que prohíbe la circulación de bicicletas en calles peatonales o la permisión de que circulen también patinetes eléctricos, con limitación de velocidad.
Reclaman más zonas de aparcamiento para autocaravanas y para trabajadores de ayuda en el hogar, más regulación para vehículos pesados en zona rural o que se especifique que el parking regulado será gratuito, entre otras cuestiones.