Los asuntos de la Casa Real llegan para montar un culebrón que dure más que el de la familia Alcántara, de la sería de Cuéntame, enterrado estos días. Y es que cada día tiene su capítulo: este trata de las indemnizaciones que pagó el Estado –1,200 millones– a la tripulación del yate Fortuna. Y es que el caso ya tiene moho de tanta historia pues empezó en 2018 cuando se iniciaron las investigaciones a cargo de la fiscalía anticorrupción.
El PP se echa a la calle en ese viaje al centro organizando congresos en diversas provincias. La estrella es Teodoro G. Egea que mantiene la conocida tesis y el bronco lenguaje sobre lo que llama gobierno ilegal, dejando la puntilla para Unidas Podemos y su líder, en un desesperado intento de que los informativos hablen de eso y no de los próximos juicios que acorralan a su partido. Por aquí seguramente no se acercarán pues Feijóo “, que es un verso libre, se las canta a diario.
Diversas organizaciones y entidades, así como partidos políticos y ciudadanos a título particular, instan al Estado a que recurra ante el Supremo la sentencia de la Audiencia Provincial que insta a indemnizar a los herederos del dictador.
Cada vez está más clara la necesidad de emprender una política enérgica en la construcción de viviendas sociales. Tarea en la que también tienen un importante papel los ayuntamientos. Al tiempo se deben estudiar las medidas ya tomadas en otras partes del territorio español de recuperar las que llevan vacías años y años. O noso presidente gana puntos al mismo tiempo que pierde alabanzas en el “papel cuche” de la capital del reino empeñada en defender a “los suyos” de Génova y ahora lo colocan como “el regionalista de Feijóo” por no hacer piña en la guerra a calzón quitado contra el gobierno bipartito. Además fue el único barón “pepero” crítico con las decisiones judiciales de prohibir cual manifestación el 8-M.
Y es que la postura de los de Casado en este tema causa entre guasa y vergüenza. El pasado sábado se reunió un equipo de “mandos” en la sede del PP para hablar del feminismo. ¡Eran cinco hombres y una mujer!
Pasada la fecha y pidiendo más de un día al año para tratar de la igualdad detengámonos en otro asunto de rabiosa actualidad: la vacunación. Al ritmo marcado no se llega a la meta prometida. Así que o se acelera o quedamos “gripados”.