O Montoro es un madridista más furibundo que Rajoy y lanza a sus inspectores contra todo lo que huela a culé, o el Barcelona hace firmar a sus jugadores un contrato secreto basado en el principio “España nos roba”, en el que les impone la obligación de no pagara a Hacienda. Porque no es normal que haya semejante cantidad de defraudadores en la plantilla azulgrana: Messi, Neymar, Mascherano, Alves..., a los que hay que añadir a los directivos, a la mayoría de los cuales que tampoco les gusta estar al día en sus obligaciones tributarias. Está claro que el Barça es más que club, es una escuela adherida al método Pujolone.