En un estado democrático no se concibe que haya energúmenos que a puñetazos y patadas le rompan los dientes, y algo más, a un viandante, al grito bravo y patriótico de ¡hijo de puta! ¡rojo de mierda!. Eso pasó hace unos días en Ferrol, increíble, el machacado es un afiliado al partido legal O Bloque, que conversaba tranquilamente, por la calle, con otra persona, y que cambió de rumbo al observar que se acercaba un grupo que buscaba conflicto. Es muy difícil que una mente normal comprenda esos hechos, que unos jóvenes ¿en nombre de qué patria, tienen derecho a herir o matar a una persona?. No tiene explicación posible. Todavía recuerdo cuando venían los coches con matones de Santander a intimidar a curas y fieles, era la década de los setenta. Pensé que nunca más lo volvería a ver, ni que habría escenas violentas que reclamen un juzgado de guardia.
Estamos en campaña de propaganda abierta, con una situación político-partidista nueva y preocupante. Se están produciendo reacciones impredecibles por parte de los partidos conservadores, y también entre los de siempre, que intentan dar una imagen de renovados, pero, a poco que surge un nuevo tema, se les descubre el hollín secular.
Por otra parte están los medios de comunicación que son el soporte de los citados para poder hacerse ver, contarnos sus programas y propagar que “son los mejores”. 
La derecha: PP, Ciudadanos, VOX, grita que “todos los españoles les estamos esperando con los brazos abiertos”, mentira cochina, de “todos” nada. Los medios, por atender a unos y otros, pueden cometer fallos graves como el ocurrido hace unos días en una emisora de radio, muy reconocida por su lucha por la igualdad y la constatación de la verdad. 
Era al amanecer, se oyó una especie de cuña, rápida, sin identificación, en la que pudimos escuchar algo así “La señora XX anda buscando por las alcantarillas y demás cloacas, miembros para sus listas, ya que no encuentra candidatos para las elecciones”, algo más dijo el que aparentaba ser un varón, no se identificó nadie y, por el timbre del locutor, creo que era una máquina de esas con las que graban voces y videos, de los que nadie se responsabiliza, pero que tienen un autor, ya que leen lo que les escriben. 
Es una pena que, una emisora a la que se le teníamos cierto respeto, se lo perdamos por actuar de forma tan vil. 
Ese partido es O Bloque, que los últimos años se unió a los nacionalistas vascos y catalanes para acudir conjuntamente a las elecciones europeas, ninguno de los tres son ratas que haya que buscar en las cloacas. O Bloque tuvo rebeldes luchadores por todo lo bueno para el país gallego, fue escuela de formación del sentimiento nacionalista, tiene actualmente personas muy interesantes, en la línea del nacionalismo progresista, pacifista y dialogante. Es el partido al que le han pateado a uno de sus militantes.
En este país gallego y en el estado español, hay una corriente conservadora obsoleta, ñoña, longeva, decrépita, que opina que la izquierda es “fea, poco elegante, sucia y pobre”, poco menos que pernoctando en los arrabales. 
Las personas que viven en chozas de plástico en las cañadas, no suelen tener tiempo para pensar si son de derechas o de izquierdas, todo lo necesitan para buscar cómo salir de la situación en la que nacieron o cayeron y que tan poco le importa al ciudadano con poder. 
La izquierda política, de partido, es ese 70 por ciento que puebla las urbes en España y en cualquier país europeo, que tanto son autónomos, como obreros en las fábricas, profesores en una escuelas o en las universidades, pagan la luz, el agua y el internet, aunque lleguen a final de mes con los bolsillos vacíos. 
Estimados cabecillas y demás de la tri-derecha española, sepan ustedes que existen tres tipos de miseria: la económica, la educativa y la socio-cultural. Una persona puede pertenecer a una familia adinerada y no saber expresarse o no saber desarrollar una profesión. Por el contrario, una persona sin cien mil euros, puede ser encantadora en su forma de comunicación social, desempeñar un trabajo como cualquiera, tener tiempo para ocuparse de lo que pasa en el barrio y buscar la forma de mejorar las deficiencias, y además, haber nacido guapa/guapo como el que más. 
Algunas veces se oyen tal sarta de idioteces que sería formidable que se echasen un cubo de agua fría por la cabeza antes de comenzar a hablar. Los líderes debían de esforzarse por tener una sensibilidad humana y socio-política-cultural mayor, que se adquiere: leyendo, viajando y dialogando.
Por favor, no impulsen la violencia, no pidan armas, no se necesitan, hemos visto que es muy fácil matar a un hombre. Jóvenes, el pensamiento, el ideario totalitario es un grave error, nadie tiene la verdad absoluta, vuestra patria os engaña si os exige eso. Galicia, que es una parte componente de España, lucha por la paz, la libertad y el diálogo. Nos sobran los violentos.