Siria

Suenan tambores de guerra anunciando otra batalla de las llamadas “selectiva  y puntual” con Siria de escenario, justificándola, de manera poco original, con sonidos que cuentan la necesidad de proteger a inocentes en un mortal proceso de revolución árabe que quiso ser primavera y es un negro y duro invierno. Irak, Egipto, Siria, a continuación Irán, Jordania, Israel y Turquía, serán los siguientes actores. Países que viven, como antes Occidente, la evolución que les llevará a ser ciudadanos protagonistas de su futuro con dignidad e igualdad,  sin verse sometidos al poder de un dictador civil o religioso. Ojalá logren su objetivo sin que la muerte y la destrucción sean los compañeros de viaje.
El drama de una población civil masacrada no es exclusivo de países árabes ricos en petróleo. Por desgracia el Cuerno de África, Sahara, etc. sufren situaciones de exterminio y asesinato de ciudadanos que no entienden lo que pasa, pero ocurre que no despiertan la compasión de los gobiernos poderosos (siempre los mismos) que están metidos en todo los saraos bélicos, incluida Alemania; hoy callada por su proceso electoral. Estas otras víctimas, son tan pobres que solo cuentan con la atención y ayuda de las  ONG’s; y seguirán sufriendo con no sé qué fin. De esta música de guerra lo que más me entristece, es que el Director de Orquesta resulta ser Premio Nobel de La Paz (nunca entendí sus méritos), que califico de hipócrita porque sus justificaciones morales no son las mismas para los más pobres; además tengo dudas que haya utilizado la diplomacia necesaria para evitar  esta nueva “guerra selectiva” que quiso iniciar pasándose a la ONU por los forros y con los mismos argumentos de Bush contra Irak. El resto de líderes, sus socios, disimulan con moralinas. El Papa ha sido categórico y claro, sin dar lecciones, pero con corrección, de diplomacia ha defendido  lo que ha de defender, mediante una carta dirigida a Putin, que actúa como presidente del G20, en la que le dice, entre otras cosas, que “abandonen las vanas pretensiones de soluciones militares”. Ojalá les haga reflexionar.
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