PARA que después digan que los catalanes no son diferentes de los espanhois. Los radicais escenificaron el miércoles la guerra entre la República y el Imperio cuando se lanzaron contra Cayetana Álvarez de Toledo, musa del ala más reaccionaria del PP. Mientras tanto, en León se acometía una multitud en la que todos eran del mismo bando: militantes de Vox. La no inclusión en la lista electoral de una candidata desató las hostilidades y tuvo que intervenir la Policía Local para apaciguar los ánimos. Menos mal que aún no se autorizó el uso de pistolas que reclama Santi Abascal, porque si no aquello acaba como el duelo en el OK Corral. FOTO: abascal saluda brazo en alto | aec