ue un acierto no llevar a Juan Carlos a la parlamentaria fiesta conmemorativa de marras, por su papel. La Reina Sofía tendría que sufrir un papelón de aúpa. No invitar al “Real Matrimonio Emérito”, fue un acto de cortesía a su leal, legal, y fiel esposa. Por cierto ¿Dónde celebró Juan Carlos su Santo este año, en España o en el extranjero? Insisto: Además de reprobar a Montoro por pasarse la Constitución por el forro, deberían denunciarlo, y vetarlo en sus actos parlamentarios, abandonando sus escaños quienes lo reprobaron, dejándole mangado cuando largue por la jarra. Seguro que el nacho no estaría tan chulito. 
Es una lástima que Rajoy se pierda la fiesta del Orgullo Gay, por compromisos de agenda política. Bueno, lo veremos ir a testificar en el juzgado por otra fiesta. ¿Putean la presentación de proposiciones de ley de Podemos en el Parlamento? No creo que haya gente tan cabrona. Pero ¿y si sí? ¿Dónde andará el Tío de la Vara?