Esto es, lo dijeron con esa boquita que se van a comer los gusanos, el número tres o cuatro –el señor Maroto– refiriéndose a Bárcenas, añadiendo lo de presunto y lo que le espetó el extesorero del PP al “cuadro” del partido popular, condenado por el tribunal de cuentas. Reo, pues, de un delito económico, con su compañero y exministro y exalcalde, el señor Alonso…
A los ciudadanos de a pie el asco se reparte por igual ¿saben?, pero sobre todo el asco llega a índices inaguantables cuando desde la administración –la que dirige aún el partido popular– y que nos cuenta que uno de cada tres españoles corre riesgo de pobreza y exclusión social. Que cada vez hay más familias pobres. Que ahora hay más trabajadores que, con su pírrico salario, no llegan a final de mes.
Que los comedores sociales se llenan con una nueva clase de pobres: la que hasta ayer era clase media.
Esta es la herencia de la crisis, de la administración de la misma, que deja a millones de nuestros conciudadanos sin recursos sin los que afrontar las necesidades básicas.
No lo dice Maduro, ni los rojos bolcheviques… lo afirma el Instituto Nacional de Estadística que ofrece el retrato instantáneo de la España de hoy, en las antípodas de la que nos “pinta” el gobierno en funciones y quien lo preside y aspira a volver…
Indignación, repugnancia y asco, cada día cuando al levantarnos los medios nos golpean con otra noticia de la corrupción que hiere de muerte a este país…
Otro juez acusa de diez delitos a los responsables de la Púnica, repartidos por los ayuntamientos de la zona de mando y plaza de Esperanza Aguirre y Granados, por mordidas (se cita un cuarto de millón de euros de la Gürtel al Partido Popular) que acababan, por un lado en aberraciones urbanísticas y por el otro por pastizarra para las diferentes campañas electorales…Hay ya ejemplos con nombres y apellidos: la empresa de Villar Mir (aquí le conocemos y le padecimos) pagó entre los años 2011 a 2014 dos millones de euros como compensación a un negocio que le reportó 584 millones…
Asco y repugnancia que tiene que traducirse en indignación creciente y que no acepta más excusas –no lo sé, no me consta, no me dijeron nada– y que ahora piensa que los jueces y policías están contra ellos. La justicia, señores del Partido Popular, están contra los ladrones, los delincuentes….
Lo que pasa es que ahí encuentran a muchos de los suyos…