Hace un año que la red de saneamiento permite que la Ría de Ferrol vaya recuperándose y saludábamos que Ferrol y Narón llegaran a un acuerdo con Augas de Galicia para la gestión del sistema, que se plasmaría en un convenio para subsanar las desafortunadas decisiones tomadas poco ante de su puesta en funcionamiento, pero, a día de hoy, sigue sin firmarse, generando un rifirrafe entre administraciones locales.
Se llega a esta situación por decisiones de los últimos gobiernos populares de Ferrol sobre Emafesa, sociedad mixta pública con un socio privado, Urbaser, con fecha de caducidad y creada para acometer un plan de inversiones de 10,6 millones de euros.
Así, en 2006, el gobierno de Juncal decidió internalizar el coste de los créditos de aquel plan, lo que liberó al socio privado del riesgo crediticio y le permitió reducir su ratio de deuda. En 2012, el Gobierno de Rey aumento el periodo de amortización de las instalaciones de los 30 años iniciales hasta los 50; a mi modo de ver, una prórroga encubierta de 20 años. En 2013, Rey Varela asume la gestión de la presa y embalse de As Forcadas. Por último, en 2014, asume la gestión del saneamiento sin haberse terminado las obras, sin tener en cuenta a Narón en un proyecto claramente supramunicipal, aprueba unas inversiones para el rural con mini depuradoras, todavía sin iniciar, y de las que nadie parece acordarse. Para financiar todo, se aprueba la archiconocida tasa, que en Ferrol sólo pagan una parte de los vecinos, los que están conectados a la nueva red.
Ya en marcha el sistema para una parte de Ferrol y Narón, después de rocambolescas actuaciones, Ferrol en Común rescata en este mandato la tasa, tragándose sus propias palabras contra ella, y el Alcalde tiene que soportar la querella de la plataforma contra la tasa, que parece olvidar que fue Rey Varela quien montó todo esto lío y que, en Ferrol, sólo una parte de los ciudadanos asumen su coste e inversiones aunque a todos beneficie una ría saneada.
Creo que sería más productivo centrarse en desmadejar todo este follón, al que la Xunta mira desde el balcón, pero del que tiene una enorme responsabilidad.
El sistema de saneamiento es supramunicipal y si Narón no se encomienda a Ferrol, su gestión también debe ser de ese ámbito. Así las cosas, sólo queda actuar dentro del ámbito de la ley de contratos del sector público e iniciar un procedimiento de adjudicación. Mientras no se adjudique, que el convenio entre los concellos y la Xunta defina su gestión temporal, lo que debería haber hecho Rey Varela y no hizo, vaya usted a saber por qué.
Que la gestión no estropee el buen funcionamiento del saneamiento, del que todavía quedan inversiones que realizar.