Al final será el próximo lunes. No estaremos a la altura del galáctico encuentro entre Zapatero y Obama, pero seguro que, así entre nosotros, la reunión entre Pedro Sánchez y Pablo Casado puede dar para mucho. O no. Todo dependerá de las intenciones reales del presidente del Gobierno tenga puestas en este encuentro. Hasta el momento, su intención de unos grandes pactos de reconstrucción le ha salido medio rana. Todos han marcado líneas rojas que, de entrada, parecen absolutamente inasumibles por todas las formaciones, ya que se basan, la gran mayoría en planteamientos ideológicos (y eso olvidándonos de JxCat, que insiste en la autodeterminación). Por ello, más le valdría a Pedro Sáchez realizar una oferta tentadora a Casado, algo que el líder del PP tenga que apoyar. Bueno, a Sánchez y al resto de los españoles. Está muy claro que la posición de debilidad del Gobierno nos hace a todos más vulnerables y si queremos superar la crisis que se nos echa encima vamos a necesitar un plus de resistencia.