Cuando uno oye hablar de la dirección de Anova, siempre se plantea la misma pregunta: ¿Pero en Anova hay alguien que no pertenezca la dirección? Y llega a la misma conclusión: Igual los irmandiños anovados sufren un fenómeno de desdoblamiento de personalidad y lo mismo hacen de dirección que de militantes. El caso es que a los miembros de esa dirección militante han empezado a tremerlle as pernas y no porque anden por Triacastela, donde van de tremor en tremor, sino porque se han acercado demasiado al estoupido de En Marea, originariamente un espacio multicultural hispano-galacio y ahora sabe Dios qué, y ya sienten cómo el fuego corre por la mecha. Tanto miedo tienen que ya han llamado a reconducir la ruptura. Pero entonces surge Martiño “2.0” Noriega e alá vai o invento. El antiguo golfiño del ya octogenario Beiras, santón jurásico del nacionalismo de la nazón de Breogán, que intervino como ginecólogo en el nacimiento del partido instrumental, afirma ahora que esa es la peor opción para presentarse a las elecciones generales.... Menos mal que no tiene militantes, porque si no estarían tolos de todo.