El carro de los que dan rienda suelta al kilovatio

Una vez tachados del calendario la Nochebuena, la Navidad, la Nochevieja y el Año Nuevo, a los pobres estómagos de los españoles ya solo les queda el día de Reyes para cerrar un nuevo ciclo navideño. Y, coincidiendo con este final, Vigo volverá a dejar de verse desde el espacio si Abel Caballero no tiene a bien mantener la iluminación festiva todo el año por aquello del potencial que tiene como atrayente de visitantes. La realidad es que Abel se gastó en luces 43 veces más que lo que dedicó a alumbrado Ada Colau en Barcelona, y la verdad es que, al final, logró su objetivo de poner a Vigo en el mapa navideño. Solo queda por ver cuántos alcaldes seguirán su ejemplo y darán rienda suelta al kilovatio el próximo año.