Pedro Sánchez se volvió a telerreunir ayer con los presidentes autonómicos y, de nuevo (como no podía ser de otro modo) se encontró con su compromiso de lealtad ante las decisiones que está tomando el Gobierno. Sin embargo, algunos le pidieron que esa lealtad que ellos otorgan sea recíproca. Ahora mismo, España es un reino de taifas en el que las comunidades tienen que acudir a los mercados internacionales para abastecerse de un material sanitario que escasea y es caro. El Gobierno asumió el control total de la Sanidad, pero es evidente que no está llegando y su material sigue sin aparecer y, cuando lo hace, es tan poco que se gasta en un día. Por ello, medidas como la retirada de fondos o la negativa a pagar la deuda contraída con Galicia hacen que la lucha de la Xunta contra el coronavirus sea más difícil, aunque Feijóo ya anunció que cada euro del presupuesto, si es necesario, se irá para Sanidade.