Importantes retos tiene nuestra Iglesia Católica que es criticada cada día más y no precisamente por los ajenos a ella; ahora son las distintas bases quienes expresan su malestar en tonos más altos.
Tiempos difíciles y complejos se avecinan para ella que me atrevo a bautizar como “Pensar en Tiempos Revueltos” y que necesitan respuestas claras que de momento, ella, no tiene o no sabe. En occidente nos hemos pasado al bando del “todo vale”, lleno de mediocridad y con importante ausencia de líderes carismáticos en todos los órdenes; es como si nos hubiésemos incorporado a la práctica social del “Todo a 100”, con el agravante en la Iglesia de que padece, además, una crisis (ha dejado de ser tal, para ser característica) de falta de sacerdotes que provoca una carencia muy seria de los instrumentos tradicionales de evangelización. Es como si se hubiese quedado sin su infantería. Vacío que no se va a llenar, y que no se ha evitado sucediese cuando se sabía que este momento llegaría.
Por estas causas, y otras comentadas en distintas ocasiones (pero sobre todo por vivir de espaldas) hay importantes discrepancias en todos los escalones de la Iglesia, en momentos que ya nos cuestionamos todo; que no es malo, al revés, los debates aportan luz. Hoy los cristianos tenemos que preguntarnos
¿Cuál es el papel (y como evangeliza) de la Iglesia en el siglo XXI? Necesitamos repuestas; somos una sociedad que camina, como debe ser, al laicismo. El reto está sobre la mesa y la Iglesia y sus obispos no se atreven a afrontar; saben que el modelo actual de catequesis y evangelización no funciona, los resultados lo dicen; hay que ponernos el traje de evangelizar y sacudirnos la pereza y, entre otras cosas, explicar que la diferencia entre solidaridad y caridad, es la Fe.
Creo que no es tan importante garantizar misas dominicales celebradas aprisa y corriendo, si en poco tiempo habrá que cerrar templos.
Srs. Obispos, urge ser valientes, hoy ya no se evangeliza celebrando el año de la Misericordia con una procesión; ni con veinte. Tampoco copiando lo hecho el año pasado. Asuman su liderazgo.