Ferrol se encamina a ser una ciudad inteligente en la que a través de un móvil se podrá saber el lugar donde hay mejor aparcamiento, o la mejor ruta para entrar en la ciudad, o podrá gestionarse con mayor eficiencia y en tiempo real el alumbrado público o la recogida de basuras. Ay! Que suerte tendremos en Ferrol. Lástima que, a fecha de hoy, el alumbrado público sea infame, el estado del pavimento de la mayoría de las calles indigno, la recogida de basuras un caos que te puede pillar a cualquier hora y formar un atasco fenomenal, las zonas de aparcamiento ni existen ni se las espera (al margen de patatales improvisados como el Sánchez Aguilera), el transporte público es el peor y más raquítico de todas las ciudades gallegas y un largo etcétera de deficiencias que todos los ferrolanos conocemos y padecemos a diario. Está bien lo de la smart city, pero yo, hoy por hoy, me conformaría con un smart gobierno municipal que solucione los problemas más básicos de la ciudad.